Cómo ganar una guerra perdida

Cómo ganar una guerra perdida:

 

Uno. Excavar trincheras
con palas, lapiceros, saxofones.
De las grietas, hacer cicatrices.

 

Dos. No llevar uniformes.
Cada cual adoptará el disfraz
que menos le ofenda.

 

Tres. No distinguir noche y día.
Permitir la soledad a quien la elija.
Adoptar perros y recién llegados.

 

Cuatro. Celebrar una fiesta
por cada trinchera. Llegará el enemigo
y no entenderá nuestro lenguaje.

 

Les será imposible la conquista:
ellos no aman a los perros mestizos
ni arrancan orgasmos a las palabras.
Perderemos la guerra de las mayúsculas
pero la vida está de nuestra parte:
lloramos y celebramos la brizna.

 

Copyright © 2014. Ana Pérez Cañamares
Todos los derechos reservados. All rights reserved

Cíclica profecía

CÍCLICA PROFECÍA

 

Llueve llanto en el Sur,
llanto moreno,
llanto de hueso al sol,
llanto de grieta,
llueve llanto de sed
y hasta el amor
llora con telarañas
en el vientre.

 

Cuando rebosa el cuenco de la nada,
el éxodo se asoma
con su llanto equipaje a los abismos
y vislumbra otros mundos plenos de agua y de viento:

 

son los nortes radiantes del expolio.

 

Con las manos desnudas,
trepa las alambradas de la ciudad dormida.
Polizón de su pulso, hace el viaje
lapado a un duro vientre de carburo.
Héroe con fe de fuga, viene por tierra o sangre,
útero, maletero, alcantarilla…
…muere entre las murallas de los mares
para alcanzar la orilla de la vida.

 

Llega en la noche oscura de su piel,
con ojos mares blancos donde vuelan
gaviotas ateridas de nostalgia.
Llega con su odisea sin laurel.
Llega y es bautizado nueva bruja.
Viene a nuestras hogueras de ignorancia
a contemplar un llanto diferente,
un llanto de hombre blanco que ha derrapado en curvas
de beneficios bajos.

 

Pero hay un dios calmante para hombres de la curva,
un dios que les concede mano de obra morena
de corazón tam tam sobreviviente;
lo traen en procesión los gurús analistas,
lo traen puliendo cifras con magias de la jerga
sin descifrarle al mundo la profecía exacta:

 

Tras la venta del viento que robasteis,
cuando haya fluctuado
el nuevo oro mutante en las derivas,
después de hacerse gruesa la grieta en las gargantas,
tendrá lugar la quiebra del corazón fundido.
Llegaréis los Pilatos aspirantes
a recoger cosechas abonadas con sangre;
vendrá dios Eficiencia subido a su opa mágica,
convocará su junta, comprará
dólares con dolores subterráneos.
Aduciréis frenazos del consumo,
déficit comercial, zarpas devaluadas,
recesión, depresión, abismo crediticio…
No vendrá nada mal un holocausto
y un estúpido velo de colores
que consiga ocultarlo.

 

Mirad detrás del velo:

 

llueve llanto en el Sur,
llanto moreno,
llanto de hueso al sol,
llanto de grieta;
llueve llanto de sed
y hasta el amor
llora con telarañas
en el vientre.

 

Copyright © 2014. Miguel Ángel Muñoz Pérez
Todos los derechos reservados. All rights reserved.

Ahora

AHORA

 

Ahora que la cerveza nos enseña
que somos ciudadanos del mundo
y que el coche nos da libertad
ahora que los televisores
nos regalan el mañana
que empieza hoy
y los detergentes vienen del futuro
para relucir y mantener
el patriarcado
que anecdotiza la violencia
y cosifica a la mujer
ahora que la telefonía nos regala
el sueño de la comunicación
a máxima velocidad
y el aislamiento social interactivo
ahora que la vida
se disfruta en fascículos coleccionables
y la solidaridad
es un sms con la palabra vida
ahora que un pájaro azul
pía 140 caracteres
para cambiar el mundo
o calmar nuestra conciencia
ahora que el modelo a seguir
son futbolistas o tronistas
y la corriente de opinión
la dictan tertulianos
a sueldo de la versión poder
o del corazón
ahora que el gran hermano
nos enseña a conocernos mejor
y la política
es un ejemplo de trasparencia y honradez
ahora que nuestra amistad
se mide en facebook
y nuestra valía
en el numero de “me gusta”
ahora que todo es instantáneo
prefabricado, individual
egoísta, superfluo y banal
ahora es el momento
de acabar con todo
y empezar de cero.

 

Copyright © 2014. Íbon Zubiela
Todos los derechos reservados. All rights reserved

Nana inversa

NANA INVERSA
Quiero ser hombre bomba, mamá,
Y así mudar el hambre
por el regazo eterno que nos promete Alá
en los libros soñados por el hombre.
Quiero ser hombre bomba, déjame
jugar a desterrarme de este odio
que nutre sus raíces
en la promiscuidad de las fronteras.
Quiero ser hombre bomba. Ya verás;
cuando sea más alto
que este nido de escombros,
tu dolor tendrá orgullo de su retoño mártir.
Quiero ser hombre bomba, y lo seré.
Si disperso esta sangre que pariste llorando
En aquel lecho viudo tan reciente,
vivirá mi venganza en su epitafio.
Quiero ser hombre bomba, mamá;
matar, morir, arder,
ir de la lumbre a un limbo
como papá se fue.
 Copyright © 2014. Miguel Ángel Muñoz Pérez
Todos los derechos reservados. All rights reserved.

De Bienvenida señora Durrell

XLVI

 

Se hacen arreglos
costuras de vidas rotas
rellenos de almas vacías
menguado de perneras
deshilachadas
de arrastrarse
en la derrota
se zurcen medias
se abren ojales
se ponen botones
sobre solapas de escarcha
a las manos sufridas
y exangües
les salen sabañones
se hacen hechuras
sueños de fantasía
en un taller lleno de tristeza
los clientes abundan
abarrotándolo
de penuria
densa y fría

 

Del libro Bienvenida señora Durrell
Copyright © 2014. Ana Tomás García
Todos los derechos reservados. All rights reserved

Ya están aquí

YA ESTÁN AQUÍ

 

Oigo como se acercan la malditas,
formadas, frías, implacables y juiciosas.

 

Veo como se acercan con sus carnívoras
reservas abiertas

 

Siento como desgarran con sus fauces vengativas
la osada desidia creativa

 

Se acercan armadas y dispuestas las previsoras
hormigas,
no perdonan a la veleidosa cigarra, ¡las malditas!

 

Copyright © 2014. Igone Urrutikoetxea
Todos los derechos reservados. All rights reserved

¡La cabeza se había transfromado en Luna!

¡LA CABEZA SE HABÍA TRANSFORMADO EN LUNA!

 

El hombre se degolló y dejó ahí su cabeza.
Los demás fueron a buscarla.
En cuanto llegaron, pusieron la cabeza en un saco.
Más adelante, la cabeza cayó al suelo.
Volvieron a poner la cabeza en el saco.
Más adelante, volvió a caer la cabeza.

 

Y otra vez pusieron la cabeza en el saco.
Más adelante, cayó otra vez la cabeza.
Entonces doblaron el saco con otro saco más grueso.
Y, sin embargo, otra vez cayó la cabeza.
Menester es decir que llevaban la cabeza para mostrarla a los demás.

 

No pusieron ya la cabeza en el saco.
La dejaron en mitad del camino.
Y se fueron.
La cabeza corrió tras ellos.
Atravesaron el río.
Pero los siguió la cabeza.
Treparon a un bacupariseiro cargado de frutos
para ver si la cabeza seguía adelante.
Pero la cabeza se detuvo al pie del árbol
y les pidió frutos.
Entonces los hombres sacudieron el árbol.
La cabeza fue a buscar los frutos.
Y luego pidió más.

 

Los hombres sacudieron entonces el árbol
de manera que los frutos cayeran al agua.
La cabeza dijo entonces que allí no podía buscarlos.
Los hombres arrojaron entonces los frutos a lo lejos para apartar
a la cabeza y permitirle que se fuera.

 

Mientras la cabeza iba a buscar los frutos,
los hombres descendieron del árbol y partieron.
La cabeza regresó, miró el árbol,
no vio a nadie
y continuó rodando su camino.

 

Los hombres habían quedado a la espera,
por ver si la cabeza los seguía.
Y vieron cómo venía, rodando, tras ellos la cabeza.
Corrieron,
llegaron a sus chozas, dijeron a los otros que la cabeza
llegaba rodando y que era menester cerrar las puertas.
Todas las chozas están cerradas.
Una vez llegada la cabeza ordenó abrir las puertas.
No las abrieron los amos porque tenían miedo.
Entonces la cabeza empezó a pensar en su futuro.
Si se convertía en agua, la beberían.
Si se convertía en tierra, la pisarían.
Si se convertía en casa, los hombres la habitarían.
Si se convertía en buey, la matarían y comerían.
Si se convertía en vaca, la ordeñarían.
Si se convertía en harina, la comerían.
Si se convertía en zanahoria, la comerían.
Si se convertía en sol, cuando los hombres tuviesen frío
       tendría que calentarlos.
Si se convertía en lluvia, las hierbas crecerían y las bestias
       harían pasto de ella.
Entonces pensó y dijo: “ Voy a ser luna”
Gritó: “ Abrid las puertas, pues quiero llevar mis cosas “
Ellos no abrieron.
La cabeza lloró. Y gritó: “ Dadme, al menos,
Mis dos pelotas de hilo”.
Por un hueco le arrojaron las dos pelotas.
Las tomó y las lanzó hacia el cielo.

 

Todavía pidió que le arrojaran una pequeña varilla
para enrollar el hilo que le permitiese elevarse.
Entonces dijo: “ Puedo subir, voy al cielo”.
Y comenzó a subir.
En seguida, los hombres abrieron las puertas.
La cabeza seguía subiendo.
Los hombres gritaron: “¿ Te vas al cielo cabeza?”
Ella no respondió.
Al llegar al sol, inmediatamente
Se transformó en luna.
Hacia el atardecer la luna era blanca, toda linda.
Y los hombres quedaron estupefactos:
¡La cabeza se había transformado en Luna!

 

Copyright © 2014. Andrés Felipe Yaya
Todos los derechos reservados. All rights reserved

Reinterpretación capitalista

REINTERPRETACIÓN CAPITALISTA

 

Al diablo con las reservas submarinas
y demás tesoros naturales. Tendamos
rentables oleoductos. Una buena paella
bien vale una marea negra. Al diablo
con las posidonias y con los lugareños.
Disparad al corazón del planeta.
Una bolsa de gas bien vale un terremoto.
Al diablo con los acuíferos y las turgentes montañas.
Penetrad en las oscuras entrañas
y liberad un cóctel de metanoles.
El beneficio trimestral es la nueva misa.

 

Copyright © 2014. Adolfo Escat
Todos los derechos reservados. All rights reserved

Pido la Palabra

PIDO LA PALABRA

 

Jesús fue un gran rabino.
Nada más y nada menos
que un rabino revolucionario.
Pedía más humanidad para el pobre
y menos piedras para la prostituta.
Pero alzaron sus voces
los fariseos y los poderosos.
Por eso más o menos
fue en la cruz cru-ci-fi-ca-do.
Así le fue al inventor de la fe.
Pero los gerentes de sus templos
… son san-ti-fi-ca-dos.

 

Pablo es como el insolente rabino:
con la lengua y la melena del rebelde
pero sin la túnica sagrada.
Y también más o menos agrada
y le llama al pan, pan, y al vino, vino.
Pide un salario digno y no paupérrimo.
Pide menos piedras para dueñas de úteros,
menos pelotas de goma para ojos y testículos.
Y pide más dignidad para los desahuciados.

 

Y digo yo … ¿ es esto pedir demasiado ?.
Naturalmente que es pedir demasiado:
¡ populista, grosero, bolivariano !.
Peligran las prebendas de los notarios
y los secretos de las castas. Se comprende
la ira de los afortunados. De los elegidos
por los dedos de divinas amistades.

 

Pero yo me pregunto, Pablo:
¿ qué magos nos acompañan ?
¿ y alcanzará la fe para obrar el misterio ?
¿ multiplicarás los panes y los vinos ? .
Pido disculpas a los peritos en maravillas.
¡ Hay tan pocos peces ya en los lagos !.
Porque siempre fue embarazoso
concebir milagros sin experiencia.
Porque hay fariseos planetarios …

 

quise decir intereses planetarios.
Pues el dinero nunca duerme
y Judas acecha en el huerto.
Y en el país de los godos
cada pueblo es un reino
y cada súbdito un soberano.

 

Calculad bien los milagros
porque … ¿ volverás a la cruz ?
ofrecido en un altar sagrado
al voraz vecindario.
¿ Volverás, Sangre, al vino,
y tú, Vino, a la liturgia,
y tú, Dolor, a un nuevo evangelio ?

 

Copyright © 2014. Adolfo Escat
Todos los derechos reservados. All rights reserved

Poco a poco

POCO A POCO

 

Poco a poco el viejo mundo des-
aparece: bosques, lobos y leones
ceden el paso a parques, perros y gatos.
Búfalos indómitos a bueyes castrados.
Elefantes y barritos a dumbos infantiles
– cuando no a señores elegantes – .
Selvas con todas sus plantas y maravillas
a plantaciones y plantas industriales.
Y los paraísos que fueron aquellos mares
a los yermos desiertos que son estos océanos.

 

Pero no importa. Tenemos planes.
Tenemos nuevas Arcas de Noé. Parques
zoológicos dotados con jaulas y terrarios
con certificado ISO 9001 y sellos de calidades.
Parques en los que las parejas aburridas
matan el tiempo copulando delante de veterinarios.
Por la ciencia y por la caja registradora
de los fines de semana. Por los empleos.
Encapsulamos a los océanos en los oceanarios
y vendimos entradas para ver a los peces.
Les dimos nombres de locos. Como Nemo.
Todo sea por la educación de los pequeños…
pero ¿ quién renunciará el primero a su plato
de pescaíto, de gambas o de langosta ?

 

Tenemos planes. Sí, planes para las costas.
De calas de piedra y gordas arenas
haremos puertos deportivos de granito.
Donde antes hubo pulpos y caracoles
habrán yates, castas y tarifas.
De playas vírgenes de finas arenas,
calas privadas para duros hormigones.
Donde antes olas, silencios y horizontes
hoy, cotos y hoteles en Algarrobicos.

 

Tenemos más planes.
Elevaremos
termiteras
humanas
sobre planicies
y costas doradas.
De las termiteras emergerán ejércitos de bañistas
y aplastarán a las huestes
de Neptuno. El viejo Neptuno.
Arpones de verano y de buceo arrasarán sus filas.
Las bajas serán terribles.
Posaremos alegres con sus cadáveres.
La muerte misma será un divertido recuerdo.
Contaremos sus muertos
por huecas caracolas
apilándolas como cabezas asirias antaño.
Será una victoria sin precedentes en los anales.
Pero antes araremos las arenas de las playas
en busca de colillas, condones y pañales.
Las olas escupen todos los residuos.
Especialmente los residuos humanos.

 

Moraremos en cavernas iluminadas
en primera línea de playa.
Cavernas dúplex, alto estanding y con vistas
al sublime desierto acuático. Lejos de los osos,
nuestros viejos y entrañables enemigos.
Aún aullamos como los lobos
al contemplar el viejo metal dorado.
Hoy el hueso de pene de oso
vale dinerales en Orientes.
Y el kilo de cuerno de rinoceronte.
Y la tonelada de diente de marfil.
Los contables y los crédulos fálicos
son los mejores aliados de nuestros planes.

 

Porque nuestra glotonería es legendaria.
Ni los lobos nos igualan.
Porque somos ya una raza de obesos
y miopes, sentados delante de televisores.
Engordamos al toque del balompié, nuevo opio
del pueblo. Nuestra ceguera es obstinada.
Es una ceguera que se dispara un arpón en el pie.
Y sonríe para la foto.
Es una ceguera catódica y mitológica.
Y engorda para la tumba.

 

Con más planes y más calígulas
no brindaremos por más victorias.
Muy al contrario.

 

Copyright © 2014. Adolfo Escat
Todos los derechos reservados. All rights reserved

Razón y fe

RAZÓN Y FE

De tanto creer
que no existe solución,
ahora ya ni siquiera
recuerdan cuál era el problema.

Cualquier pasado dorado
de ética popular,
de cambio o revolución
nunca existió para ellos.

Son presas de un futuro
cínico, terco y sumiso
que les ciega de egoísmo
disfrazado de razón.

(Altiva dialéctica
de antítesis dóciles
para una historia amañada
de sublimes ecuaciones)

Todavía se ríen ufanos
si les dices que habrá un día
en que sus hijos les pidan
cuentas por su inacción.

Y te tratan de loco
si les dices que llorarán
por haber perdido la fe
en la bondad del ser humano.

Para ellos el hombre
es un lobo para el hombre
y vivimos en una partida
de calculado ajedrez.

Ellos no sienten aún,
pero nosotros ya podemos.

Copyright © 2014. Antonio Martínez Arboleda
Publicado en «Los viajes de Diosa» (Diego Marín, 2015). Todos los derechos reservados. All rights reserved

Salvad a los pobres

SALVAD A LOS POBRES

¡ Salvad a los pobres, dadles dios y pan !.
¡ Dadles pasta, döner, pizza con vino !.
¡ Dadles patatas fritas con mac y una cola !.

¡ Salvad a los pobres con digital entertainment !

Dadles maná y tele … con potente mando a distancia.
Y bosques de hongos parabólicos.
Y listos teléfonos enchufados al amigo americano.

¡ Salvad a los pobres, dadles goles y miles, millones de amigos !

Dadles Gúguel y Feisbuc. Dadles un selfie de culo de mona.
Dadles héroes ronaldos del balompié y mil copas, porfa.
Y podios y banderas y escudos e himnos en mil campeonatos.

¡ Salvad a los pobres, dadles una visión, sueños !

Dadles chismorreos planetarios y reinas del porno.
Príncipes del papel cuché y divas descocadas dadles.
Y un Gran Hermano y una Jungla de concursos.

¡ Salvad a los pobres, dadles emprendedores !

Una corbata, un maletín… con licencia para matar a curros.
Dadles una cuenta secreta en el país de las vacas azules.
Y un rifle de gran calibre para descerebrar a paquidermos.

¡ Salvad a los pobres, dadles el Niño, el Gordo, el Ciego !

Salvad sus almas jugadoras, sus cuentas o sus bolsillos
al menos. Hombres buenos vestidos de blanco … ¡ salvadles !…
así en la Tierra como en los espacios siderales del vasto universo.

¡ Salvad a los pobres, dadles poetas bienaventurados !

Es decir, vates con vocaciones literarias kamikazes, hai.
Tipos como Jesús o Sócrates, que se inmolan en piras de verdades.
Salvadles por todos y por Pablo que está en el Purgatorio.

¡ Salvad a los pobres, pero antes, abrid un chiringuito en la playa !

Copyright © 2014. Adolfo Escat
Todos los derechos reservados. All rights reserved

Negra elegía

NEGRA ELEGÍA

¡Duérmete, negro, duerme!
¡Duerme y reposa!
Fue muy largo el camino,
doloroso y cansado.
Ni el ígneo sol, ni el viento,
ni la lluvia, ni el frío,
ni los hoscos humanos
que te vieron pasar,
piedad de ti tuvieron.
Fueron tus compañeras
llagas y heridas,
la amarga sed, el hambre
y la soledad.

Pero ya estás aquí.
Aquí donde querías.
Ya vislumbras las vallas
que apenas te separan
del paraíso
que imaginaste, iluso,
allá en aquel infierno
donde morías
de miseria o de guerra.

Y tu ánimo valiente
se niega ahora
a deprimirse
por verte rodeado
de centenas de hermanos
que contigo comparten
esa dura negrura
de vuestra realidad
y vuestra piel…
a más de ese objetivo
desatinado
de atravesar las vallas.

Sí, contemplas sus brillos
con los primeros rayos
del sol naciente.
Y sabes que esos brillos
no son festivas luces
de bienvenida.
¡Son filos que relucen
porque desgarran!
¡Son espinos que fulgen
porque se clavan!
Y sabes que os esperan
con inclemencia.
Y que así los han puesto
inhumanamente
porque allá, en la otra parte,
no sois queridos.

Mas, a pesar de todo,
un fatal día
llegó el crucial momento:
Desbocada embestida
de negras carnes
asaltaron las vallas…
Pero… ¿eran vallas?
¿Acaso aquellos cuerpos
exacerbados
sentir dolor podían?
La apuesta era ya solo
a vida o muerte.

Tú sentiste tu carne
arañada, rasgada,
y caíste doliente
sobre las concertinas
que acabaron, triunfantes,
de desgarrar tu cuerpo.
Mas todo inútil:
Oscuros policías
empujaron tu cuerpo,
sangrante y malherido,
por una portezuela
‒la de la infamia‒
e impasibles lo dieron
a oscuros policías
del exterior.

Y ya nadie, ninguno,
ni en esta o la otra parte
de la funesta valla,
se interesó ya nunca
de un harapiento negro
desconocido y sucio,
que quiso un día aciago
entrar ilegalmente
en el mundo glorioso
de los nobles países
civilizados.

Tal vez allá, muy lejos,
en una vieja choza
de un mísero país,
una madre, una esposa
o unos entecos hijos
de brillante azabache,
guarden inútilmente
una esperanza vana
de una noticia tuya
que ya nunca, ya nunca,…
ya nunca llegará.

Copyright © 2014. Alberto Moll
Todos los derechos reservados. All rights reserved

Northern Lights

NORTHERN LIGHTS

50 años perdí,
50 Auroras boreales

Creí en el Himalaya.
Vi los horizontes,
La puesta de sol en Uganda.
Fui mercenario,
Trafiqué con el sol,
Vendí sílfides
En los pasajes
De la ciudad antigua.

50 años perdí
Buscando en el arroyo
El secreto del salmón,
Buscando la ruta
Escondida,
Las calaveras parlantes,
Buscando en las minas
Nunca hallé
Cuarzo,
Ni estaño,
Ni cinc,
Ni cobalto.

50 auroras boreales.
Encontré en la selva inhóspita,
Un temblor profundo,
Que arrasa el bambú
Que carcome la selva,
Encontré una mariposa
Junto al dique,
Mientras rebasaba
El agua la rivera.

Una mariposa roja
Se imprimió en mi rostro
Y Nunca vi tus ojos,
Siempre Esquivé tus pupilas
Y el contacto de tus manos.
Siempre incliné mi frente
Y sellé tu voz mis oídos.
Me hice de cera
En el estío,
Mientras tus lágrimas
Bañaban mi sien.
Nunca clamé tu nombre,
Viendo los carruajes partir,
Siempre el mismo olivo
Permaneció ardiendo,
Siempre los mendigos
Permanecieron a las afueras.

50 años perdí
50 auroras boreales

Copyright © 2014. Juan Andrés Gutiérrez
Todos los derechos reservados. All rights reserved

Madre

MADRE

Ella solitaria,
Marcha en un auto hacia la frontera,
En las montañas
Se escuchan disparos,
Los rebeldes cruzan las puertas.

Yo de niño tomaba mi maleta,
Huía por las callejuelas,
Llevando una botella de ron,
Observando las estrellas.
Dormía debajo de los puentes
Y araba las cisternas,
Una crisálida me robó
El amor por las siestas.

Tenía miedo de volver a casa,
Había osos en los valles,
Una cabra mugía en el campamento,
Por eso bebía con frecuencia,
Ahora el riachuelo
Trae bayas y nueces,
Ahora el río trae una
Serpiente negra.

Todo está perdido
Los rebeldes allanan el casón,
Incendian los pasillos,
Hay luz, hay luz.
El auto está detenido
Tu maleta hecha jirones,
El pasaporte está en la cisterna,
Con tus pequeñas jeringuillas,
Tus curas y tus navajas de bronce.
La multitud irrumpe en la avenida,
Tu cabello ondeado por la brisa,

La ciudad está destruida,
Todo arde,
Todo está deshecho,
Ahora puedes encontrarme

A casa, a casa
En tus brazos
Ahora puedes llevarme
¡Madre tengo hambre!

Copyright © 2014. Juan Andrés Gutiérrez
Todos los derechos reservados. All rights reserved

A quién importamos

A QUIÉN IMPORTAMOS

A nadie importa ya nada de lo que quisimos,
tampoco lo que somos, seremos y fuimos.
En prole de difuntos nos hemos convertido,
generaciones inciertas, quintas de olvido,
almas despiezadas de llanto y suspiro.

 

A nadie importa ya nada de lo que decimos,
ni a vosotros, ni a ellos, ni a nosotros mismos,
con la voz enmudecida a golpe de derribo.
Atrás quedó el sueño, la ilusión y el destino,
tan lejos como largo ha sido el camino
que hemos recorrido hasta el filo del abismo.
Un paso más, sólo uno… y el infinito.

 

A nadie importa ya nada de lo que sentimos,
mariposas afiladas, escarpados cariños,
vaivenes de esperanza con apagado brillo,
tormenta interrumpida, temporal clandestino,
aguacero nocturno sobre los cuerpos heridos
desangrados de pan y desollados de vino,
con hambre de hambre y sed de sentido.

 

A nadie importa ya si aún estamos vivos
o somos legión eterna de los malavenidos
que buscan en el suelo la estela de su sino,
olfateando la hierba, degustando el espino,
penando por los días de tiempo dividido
entre un ayer que se fue y un hoy que se ha ido.
Nos queda siempre, todavía, eco sibilino,
sangre que derramar en nuestro recorrido
de palabras sordas y abrazos partidos.

 

A nadie importa ya este tiempo maldito
que no termina nunca, años infinitos,
encerrados en el aire, presos del limbo,
retestinada miseria nuestra piel ha curtido.
Imposible salvación en mitad de ningún sitio.
Amarga extremaunción a unos seres casi vivos.

 

Copyright © 2014. Marcos Lloret García

No más

NO MÁS

No más calma, no más miedo,
no más opresión del pueblo.
No más engaños, no más injusticia,
no más ilusiones perdidas.
No más dolor, no más llanto,
no más días pintados de quebranto.
No más palabras, no más silencio,
no más infames sueños eternos.
No más espera, no más demora,
no más perder la vida a deshoras.
No más soles, no más lunas,
no más crímenes ni torturas.
No más hambre, no más sed,
no más muertos puestos en pie.
No más agresión, no más violencia,
no más bocanadas de aire de piedra.
No más hados, no más destino,
no más miserables mostrando el camino.
No más tiempo, no más vida,
no más verdades que son mentira.

Copyright © 2014. Marcos Lloret García

Silencio

SILENCIO

¿Dónde han huido hoy las palabras?
¿Dónde han olvidado su ritmo y su fonema?
Hoy solo son un rumor de bocas silenciadas
exiladas y apiladas en algún desván perdido
incapaces de describir emociones
estériles para transmitir sentimientos
yermas, vacías, moribundas y cautivas
con la tinta convertida en humo
esperando agonizantes en su silente abandono
a la diestra pluma del poeta
que les devuelva pasión, verdad, sueños y sentido.

Copyright © 2014. Igone Urrutikoetxea

La poesía mata

LA POESÍA MATA
 
Ya sé
que cuando sacan petróleo de una guerra
no están pensando en metáforas.
 
Sin embargo fíjate,
ahora que quedó claro que el capitalismo salvaje
es un epíteto,
como los mercaderes hacen con el libre mercado
prosopopeya
y convierten la democracia en una hipérbole,
y convierten la democracia en una anáfora,
y toman el gobierno del pueblo en antítesis
y administran su intereses con un símil
y gestionan los países como empresas
y exhortan a las naciones con un apóstrofe
y se dirigen a electores y votantes
y arengan a consumidores y clientes
y reclutan mano de obra
y alistan todas las metonimias
y las llaman cascos azules
y las llaman boinas verdes
y decretan el comienzo de las perífrasis
y declaran
el envío de tropas para el inicio
de operaciones defensivas en prevención de un ataque
y dicen eufemismos
y disparan
eufemismos
que provocan daños colaterales
y causan bajas.
 
Ya sé
que cuando sacan petróleo de una guerra
no están pensando en metáforas.
 
Ya sé que ratatatatá
no es más que una onomatopeya
sin embargo fíjate
que suena como un oxímoron
de labor humanitaria
en una misión de paz.
 
Ya sé.
 
Sin embargo
fíjate ahora en nosotros
recitando
con una paloma como único símbolo
mientras
la poesía
mata.
 
 
Iván Rafael
http://vozdetiza.wordpress.com/
cc by nc sa

Estado del deporte poético

ESTADO DEL DEPORTE POÉTICO

 

Nuestras leyendas fallecen en geriátricos.
Conectadas a máquinas y tubos. Jadeando.

 

Nuestras promesas firman contratos millonarios
y venden exclusivas fotográficas … de sus vidas.

 

Nuestros campeones sufren en canchas infiltrados
o son desposeídos de sus títulos y de sus esteroides.

 

Nuestros dioses son ya mitos en las ruinas del Olimpo
y algunos sacerdotes, ángeles pedófilos faltos de cariño.

 

Y nuestros poetas… ¿ qué es de ellos ?. Unos, son hermitaños.
Cangrejos habitantes de bellas y misteriosas caracolas.

 

Otros, son aves del paraíso que vuelan tan cerca de los astros
que queman sus alas en guerras civiles y posguerras infernales.

 

Y los que quedan en vida, sabés, son como esos ratones que sueñan
con ser un día ratas sagradas y embalsamadas. Derrotados pero grandes.

 

 
 
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