¿Calificativos adecuados? Posted on febrero 28, 2014 por tony ¿CALIFICATIVOS ADECUADOS? (en pedestres versos blancos alejandrinos) Hay quien les llama “buitres”. Otros les llaman “hienas”. Creo que se equivocan. Los buitres y las hienas buscan alimentarse de restos y carroñas de animales ya muertos. Mas los siniestros entes ‒algunos encubiertos, otros muy conocidos ‒ que son adjetivados, bien “hienas” o bien “buitres”, devorar no persiguen nuestros cuerpos ya muertos: Nos desean con vida para poder matarnos de hambre y de miseria, cruelmente explotados. Para ellos no somos ni personas ni humanos. Solo chusmas difusas, sin valor y sin derechos, que, obedientes, debemos nuestra vida ofrendarles y debemos donarles, sumisos, nuestros bienes para que ellos, impunes, más y más se enriquezcan. E incluso en algún caso nos prefieren con vida para poder matarnos en brutal represión si protestar osamos ante tanta injusticia. Por eso yo me atrevo a opinar que sería mejor adjetivarlos como “leones” o “tigres”, “guepardos” o “licaones”, que observan al acecho a sus posibles presas, vivas y confiadas, y astutamente eligen como cándidas víctimas las más débiles de ellas y las más vulnerables. Es cierto que los buitres, como también las hienas, nos despiertan sin duda mayores repugnancias. Pero el comportamiento de los depredadores que antes he mencionado, creo que se asemeja más a la ejecutoria de nuestros opresores. Y si alguien alega que esos depredadores que en el símil he usado no son los adecuados por su fama más noble, aún nos queda el recurso de comparar a aquellos, nuestros expoliadores, con reptiles variados, cuyas formas de caza también son “de su estilo”: a traición, con fiereza, y con víctimas vivas, cándidas e inocentes. Ya os supongo pensando en la frecuente imagen del veloz cocodrilo que surge de las aguas y aferra entre sus fauces la infeliz bestezuela que, confiada, en la orilla vino a saciar su sed. O la imponente boa que estruja en sus anillos la pieza que al momento engullirá completa. Mas, si hablamos de sierpes para hablar de malvados, nada nuevo diremos, pues ya en los Evangelios Jesús llama ‘serpientes’ y ‘de víboras’ ‘raza’ a aquellos fariseos, pozos de hipocresía, comparables hoy día a tantos poderosos. ¡Claro que ya sabemos qué profundo desprecio muestran esos magnates hacia aquellas doctrinas! Copyright © 2014. Alberto Moll Todos los derechos reservados. All rights reserved Share this/Compartir:TwitterFacebookMe gusta esto:Me gusta Cargando... Relacionado